El
27 de julio de 1920 forma parte de las fechas históricas del movimiento obrero
de Magallanes y representa un momento dramático en la historia social de la Patagonia.
La
madrugada del martes 27 de julio de 1920 un grupo de guardias y policías
armados respaldados por policías civiles procedieron a asaltar a balazos la
sede de la Federación Obrera
de Magallanes ubicada en calle Errázuriz y después de ingresar en su interior
prendieron fuego al edificio gremial. Algunos
militantes obreros ofrecieron escasa resistencia desde el interior, otros
huyeron por los patios traseros del inmueble y un número cercano a los 30
obreros fueron heridos a golpes de sablazos y balazos recibidos en el interior
del local sindical durante el asalto.
Los
efectivos voluntarios de Bomberos no pudieron actuar porque la policía montada
se los impidió, mientras el incendio consumía el edificio. Siete cadáveres fueron retirados del lugar y
enterrados en el cementerio de Punta Arenas.
El
gobierno del Presidente Juan Luis Sanfuentes estableció el toque de queda en la
ciudad, se prohibieron los diarios y periódicos y los detectives de la policía
civil realizaron una intensa razzia en contra de dirigentes sindicales y
militantes obreros, algunos de los cuales huyeron hacia la Patagonia argentina.
La
Federación
Obrera de
Magallanes se había convertido desde su creación en 1911, en una poderosa
organización sindical y gremial, con una amplia capacidad de convocatoria,
prensa propia, y con interlocución directa con las autoridades locales y
nacionales.
Los
hechos ocurridos en Punta Arenas fueron denunciados en la Cámara de Diputados,
obligaron al gobierno a retirar del territorio al Gobernador de la época y la Corte de Apelaciones de
Valparaíso realizó un proceso de investigación y juicio, pero no se castigó
nunca a los responsables (ganaderos, militares y autoridades de gobierno
coludidas), sino que se detuvo y procesó a varios dirigentes obreros. La iglesia católica y la congregación
salesiana en Magallanes guardaron vergonzoso silencio frente al asalto e
incendio de la FOM
y en sus medios de prensa justificaron la acción represiva.
Sin
embargo, el espíritu de lucha de los
obreros magallánicos no se apagó: en diciembre de 1920 una manifestación de
obreros se produjo en el centro de Punta Arenas reclamando justicia y castigo
para los culpables del crimen cometido.
93
años más tarde, ese mismo espíritu de lucha de 1920, sigue vivo entre los
trabajadores de Magallanes y la
Patagonia.
LA CUT DE MAGALLANES HA CONVOCADO A UN ACTO DE CONMEMORACIÓN Y HOMENAJE A LOS MARTIRES DE LA FEDERACIÓN OBRERA DE MAGALLANES, EN LA PLAZA DE LA FEDERACIÓN OBRERA, EN AVENIDA BULNES, EL SÁBADO 27 DE JULIO A LAS 12.00 HS.
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