Según las proyecciones que realiza la Subsecretaría
de Pesca y Acuicultura en Magallanes, de aquí al 2016 se triplicará la
producción de salmón llegando a las 100.000 toneladas anuales, con un
valor en ventas de USD 450 millones.Se proyecta en el mismo sentido
generar 4.000 empleos directos y 1.000 de manera
indirecta. Pero después del auspicioso desglose que realizan los
salmoneros y las autoridades del sector pesca, sería bueno hacer el
análisis del impacto efectuado sobre los ecosistemas, que ya están
realizando las actuales empresas que operan en la región, con su actual
carga productiva sobre los afluentes, lagos y mares.
De más está decir
que este análisis que mencionamos queda en suspenso.
En el orden laboral siempre se va hacer el énfasis respecto de la mano de obra generada
por la industria y su beneficio entre comillas en las economías
locales. Para el caso de Puerto Natales, las empresas prefieren y
contratan a trabajadores de la décima región
en un porcentaje considerable, con empleos de mala calidad, temporales y
miserables, en un caso similar a lo que realiza Mina Invierno en Isla
Riesco.
Entonces del beneficio en las economías locales, quedamos con
un signo interrogación.-
Por
otra parte, hoy por hoy, por ejemplo las patentes anuales que pagan las
empresas acuícolas deben ser de las más bajas del mundo, como también
los impuestos asociados a esta actividad productiva. ¿No será demasiado
guante blanco hasta ahora?.
Nunca
las partes involucradas reconocerán la falacia implícita en el concepto
del crecimiento al infinito en la producción, como fue que teórica y empíricamente operaron
en el pasado, asunto que todavía siguen realizando en menor grado, de
otra forma no se entiende como ha proliferado la peste del cáligus (CAD).
La guinda de la torta la ha colocado este gobierno de derecha – lo que no exime de responsabilidad a gobiernos anteriores y
la política implementada-con su intención velada y a ratos abierta, en
orden a autorizar el uso de las aguas para explotaciones acuícolas, como
por ejemplo, en el caso de la reserva Bernardo OHiggins.
La
misma empresa salmonicultora reconoce en Magallanes la existencia de un
recurso agua de inestimable valor, tanto por su calidad como por su
cantidad , al tener la región vastos territorios desocupados .Pero el
problema reside en que el recurso agua no viene solo en el paquete,
forma parte de complejos y delicados ecosistemas y cuando el hombre y la
industria intervienen en ellos lo hacen en su integralidad, no en
márgenes mínimos ni acotados.
Volviendo
al punto anterior, este gobierno y en especial el subsecretario
Galilea, han tratado de implementar una política inmoral y a raja tabla,
sin escuchar a la gente, ni a los pescadores, ni a nadie; salvo ,a los
que ellos consideran interlocutores válidos per se, es decir, a los
salmoneros.
El gobierno ha anunciado la definición de
las concesiones de aquí a fin de año en torno a un centenar de éstas .
No obstante ello, persisten las dudas respecto al proceso que
denominaron de
zonificación del borde costero y la redefinición de las áreas aptas
para la acuicultura (AAA).Tengo entendido que Conaf se opone a otorgar
concesiones dentro de Parques Nacionales y queda en duda también qué
dicen las comunidades indígenas, los pescadores artesanales y ciudadanos
en general y si a la postre, es considerada su opinión por parte de las
autoridades.-
Lo que está claro es que el “tema” no está cerrado ni menos los caminos a través de los cuales se exprese la voz y voluntad ciudadana.-
Editor de natalesonline.cl
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